Ayúdame, Señor, a mantenerme firme y aferrado a tus mandamientos y ley
Sostenme, Padre, para que realice y actué según tu ley y tu palabra, para que no me desvié
Ni resbale, hazme un recto a tu camino, que no pueda nada distraerme de seguir tu camino
Rodéame con tu presencia, que tu palabra sea mi aliento y alimento día y noche, para que
Tu gloria se manifieste a través de mi y en mi, para que toda cosa que emprenda en tu nombre
Prospere y la gloria y la alabanza que son tuyas sean oídas en todas partes y ante todos;
Que me escuchen y vean tus bendiciones, milagros y maravillas que otorgas a tus hijos y siervos
Ayúdame, Padre, a que tu palabra siempre sea mi escudo, que vaya delante de mi
En todo tiempo, sean siempre mi manantial y refugio, mi paz en mi meditación
Nada ni nadie me distraerá de realizar y guardar tu palabra y tu ley
En ti me regocijo y es tu palabra fuente inagotable de bendiciones y maravillas
Es reflejo de tu voz y de tu poder, es manantial de aguas de reposo en tiempos difíciles
Por medio de tu palabra, puedo sostenerme en mi presente y tener esperanza para mi futuro
Porque tú, los ves más claramente que mis ojos o mi mente, tu estas control de todo
Nada pasa sin que antes tu lo hayas escrito en tu palabra, conforme a tu voluntad
Ayúdame, Padre, sostenme en mi caminar y sea tu palabra mi fuente de fortaleza
Mi aliento y alimento para seguir adelante, por amor a tu nombre hasta la eternidad.
Escrito por
Rebecca Vila Cano