Entre la alabanza vacía y la alabanza del corazón

Cuando alzamos una alabanza debemos hacerlo desde el corazón y del alma una alabanza sincera y llena de lo mejor que hay en nosotros porque va dirigida al Señor que merece siempre lo mejor
y nuestra completa sinceridad en todo momento, no importa la situación o problema que tengamos que enfrentar siempre tenemos que dar alabanza a Dios sincera , no cometamos el error de alabar sin sentirlo porque sería como jugar con el Señor y eso es un error grave y profundo. Tengamos siempre una alabanza sincera en nuestros labios, mente y corazó para que llegue hasta el Padre no importa por lo que estemos pasando, el Padre Celestial sabe hasta donde podemos llegar y cuando es nuestro tiempo de bonanza y de recibir una bendición grande para que sepamos cuanto nos ama Dios y cuan fiel es El con nosotros aun cuando no lo merezcamos porque El mejor que nadie sabe que solo somos carne y que nos afligimos y nos volvemos ciegos al camino que debemos seguir y que El nos tiene marcado pero nos volvemos ciegos y sordos a toda señal que viene de El porque el problema o situación nos acapara más que buscar Su Guía y Su Voluntad. Por eso debemos estar siempre pegados a Su Palabra y a Su Voluntad y tener la fe de que El obrará a Su Tiempo y que nos tiene las bendiciones a la vuelta de la esquina, nos toca orar sin cesar, estar atados a Su Palabra y tener una alabanza sincera y fiel y dejar que El obre en nosotros y atravez de nosotros por eso tengamos siempre una alabanza de corazón y no una automatica que suene hueca y sin ningún sentimiento sincero. Demosle lo mejor al Señor como El lo hace con nosotros alabemos con el alma todo el tiempo.